domingo, 20 de febrero de 2011

Maravilloso, maravilloso

Hoy os dejo uno de los mejores chistes que me han contado, está en muchas páginas de internet pero lo cuelgo por si acaso no lo conocíais.

Había una gitana gorda de mandil que vendía fruta en los mercadillos y que
conoció a un señor de mucho dinero que se enamoro de ella y la quitó de la
calle y la trataba como a una reina. Viajes, coches, casas, lujo y más
lujo.....

Un día, fueron a Marbella a pasar unos días, y asistieron a una fiesta de
gente mucho postín y adineradas.
Estaba la gitana con dos señoras más charlando de los lujos y placeres de la
vida cuando dice una de ellas:

El otro día, fui con mi marido a una exposición de coches y al pasar por
delante de la firma Mercedes vi el último modelo descapotable ¡que me
encantó! Y al día siguiente mi marido me lo había regalado.

Dice la gitana: "maravilloso, maravilloso"


Dice la otra señora: pues yo fui con mi marido a una exposición de joyas y al
pasar por delante de un expositor, vi un collar de oro blanco con rubís y
esmeraldas, ¡que divino! Al día siguiente, mi marido me lo había regalado

Dice la gitana: "maravilloso, maravilloso"

Y le preguntan a la gitana: Oye , o sea, ¿tu marido no te regala nada?
Y dice la gitana:

"Sí, mi marido me ha regalado un profesor de dicción"

"¿Cómo?" dicen las otras.
"Sí, yo antes decía "asandia" y ahora digo "sandia", antes decia "malacotones" y ahora digo "melocotones"

y antes decía "me suah er coño" y ahora digo "maravilloso, maravilloso"

No hay comentarios:

Publicar un comentario